Las áreas protegidas de Chubut ya están pobladas con las colonias de pingüinos de Magallanes
Las colonias de pingüinos de Magallanes están repletas con miles de ejemplares que ya llegaron a las costas de Chubut para reproducirse, este año sin turistas debido a la emergencia sanitaria de Covid-19..
Los pingüinos llegaron a las costas de Chubut en muy buenas condiciones y van poblando las colonias, esta vez sin la visita de los turistas ya que las áreas protegidas de la provincia continúan cerradas por las restricciones impuestas por la pandemia. Aunque a la espera de la aprobación de los protocolos sanitarios y habilitación de la actividad turística.
Caminar entre pingüinos es una de las excursiones más elegidas por los amantes de la naturaleza. La población más grande del mundo se encuentra cerca de la ciudad distribuida en varias colonias. Desde Puerto Madryn se pueden realizar varias excursiones para observar a esta especie de ave marina.
La temporada se extiende desde septiembre hasta abril y se los puede observar en Punta Tombo, Punta Ninfas y Península Valdés.
Las áreas protegidas continúan cerradas pero con las medidas sanitarias listas para poder volver a recibir a los turistas cuando se habiliten los viajes.
Las propuestas sanitarias elaboradas por la Asociación de Guías de Turismo para poder trabajar en las áreas protegidas cuando se habilite la actividad, incluyen la implementación de circuitos guiados para grupos reducidos de personas en la Península Valdés, en la pingüinera Punta Tombo, en Puerto Madryn y en las localidades del Valle del río Chubut de Rawson, Trelew y Gaiman.
Recomiendan la constante higiene de manos y objetos, la desinfección cada dos horas de los transportes, el distanciamiento social y la buena ventilación en ambientes cerrados, entre otras medidas.
Estas propuestas son evaluados por el Ministerio de Turismo, las agencias de viaje y la Administración de Península Valdés, entre otros organismos, y se aprobarían en los próximos días.
En este sentido, en Puerto Madryn se creó el Sello de Calidad Sanitaria luego de un trabajo conjunto entre el sector público y privado, destinado a alojamientos turísticos y restaurantes para continuar trabajando de cara a la próxima temporada de verano, cuando se reactive el turismo comarcal, provincial y nacional.
En palabras de Marcos Grosso, secretario de Turismo de la ciudad: “Para nosotros es importante poder trabajar en pos de un turismo seguro para cuando pasen las restricciones y volvamos a ser la ciudad turística que nos caracteriza en la Patagonia. Aún sin fechas confirmadas, se avecina la temporada de verano y nosotros como destino turístico tenemos que estar preparados y acompañar al sector para que entre todos podamos brindar la seguridad que el turista buscará cuando comience a poder recorrer nuevamente el país”.
Reservas y pingüineras
La colonia más antigua está en Punta Tombo, ubicada a 189 kilómetros al sur de Puerto Madryn y a 110 kilómetros de Trelew. Es la colonia continental más de pingüinos de Magallanes. La reserva consta de un sendero de aproximadamente 3 Km (ida y vuelta), un Centro de Interpretación en donde se podrá entender mejor la vida del Pingüino de Magallanes y descubrir qué otra fauna lo acompaña.
Dentro de la Península Valdés, Reserva Natural Patrimonio de la Humanidad, se observan centenares de miles de ejemplares en las pingüineras.
Se los puede encontrar en el mirador de Punta Cantor en Caleta Valdés, o ingresar a la colonia de Punta Norte a través de la “Estancia San Lorenzo”. O en la colonia más nueva, ubicada en Punta Ninfas que tiene acceso a través de la estancia “El Pedral”.
Con la llegada de la primavera llegan provenientes del mar (donde permanecen el resto del año) para poner los huevos en la tierra, en nidos que cavan en el suelo.
Los machos son los primeros en llegar a tierra para ubicar el nido que construyeron el año anterior y recibir a las hembras.
La ceremonia de encuentro y cortejo es algo hermoso de apreciar. Septiembre y octubre transcurre entre cortejos y cópulas y los primeros pichones nacen en noviembre.
Hacia principios de abril, cuando los pichones ya están en condiciones de nadar y alimentarse solos, parte toda la colonia hasta la próxima temporada, cuando respondan al llamado de la naturaleza para su nuevo ciclo reproductivo.