Debutó Flybondi desde Córdoba a Iguazú, la primera low cost de Argentina

(Por Patricia Veltri).-

Francina tiene el pelo rubio oro y flamantes 8 años. Viaja en el asiento de la ventanilla de “Nelson”, el Boeing 737 800 con nombre inspirado en un perro labrador color chocolate, que inaugura los vuelos low cost de Flybondi, desde Córdoba a Iguazú. Cree ver las Cataratas a cada rato y excitada le señala al papá Pablo Merlo para que se asome a mirar. En otra fila de asientos va el resto de la familia: mamá Natalia y sus hermanos mayores Valentín y Juan Cruz.

Los Merlo viven en Alcira Gigena, a 170 kilómetros de la ciudad de Córdoba. “Construimos la pileta en casa y para nosotros eso sería nuestras vacaciones. Pero vimos la promoción de Flybondi con los precios y tomamos la decisión de ir juntos a conocer las Cataratas del Iguazú. Si no fuera por el bajo costo de los pasajes y en cuotas con tarjeta de crédito, ahora no podríamos viajar los cinco en avión”, cuenta Pablo.

Norma tiene 79 años y viajó desde Tucumán, donde vive, hasta Córdoba para subirse a un avión por segunda vez en su vida. Será para conocer las Cataratas del Iguazú. Lloró de emoción antes de emprender viaje.

Ellos son parte de los 189 pasajeros que transporta en su debut de la primera aerolínea de bajo costo de la Argentina, que pagaron $1.928 por pasaje ida y vuelta. La mitad levantó la mano cuando la azafata preguntó por micrófono quiénes vuelan por primera vez.

Representan el objetivo que señala Julian Cook, CEO de Flybondi: “Nos proponemos dar a millones de argentinos la libertad de volar. Sólo el 7% de la población del país viaja en avión hoy. Nosotros queremos que pueda hacerlo el 93% restante”.

Más turismo, trabajo y conectividad para Córdoba

Minutos antes de la partida  del viernes 26, prevista para las 15.10 acompañaron el evento histórico el presidente de la Agencia Córdoba Turismo, Julio Bañuelos; el ministro de Industria, Comercio y Minería provincial Roberto Avalle; y el diputado nacional, Hector Baldassi, entre otras autoridades.

Bañueños mostró su alegría por el acontecimiento que favorece aún más “la generación de puestos de trabajo, más turismo y más conectividad para Córdoba. Y este vuelo también tiene el plus de abrirnos las puertas a un mercado internacional que es el que visita Cataratas del Iguazú”.

En pista despidió a los pasajeros del vuelo inaugural el Ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich.

Como una fiesta de cumpleaños

El viaje que tarda 1h 45¨ desde el aeropuerto de Córdoba hasta el de Iguazú transcurre como una fiesta de cumpleaños. Las azafatas con uniforme de pantalón, chaqueta y zapatillas convidan caramelos, un pasajero con guitarra canta una canción dedicada a Flybondi, a dúo con una azafata.

El anfitrión es el propio Julian Cook, que viaja con una remera que en la delantera lleva ploteada a modo de souvenir las siglas de los aeropuertos que une el debut, el número de vuelo y la fecha inaugural; en la espalda, el slogan La libertad de volar. Cada pasajero recibió una de obsequio.

Además, hay sorteos de pasajes a bordo y queda claro que la aerolínea apuesta al trato cercano y amigable con sus clientes ya desde la bienvenida de la jefa de tripulación antes del despegue y cuando se dicen las medidas de seguridad, con frases como “te contamos que” o “tené en cuenta que no se puede…”.

El aterrizaje es celebrado con aplausos entusiastas por los pasajeros mientras los chorros de agua de los carros hidrantes de bomberos bañan el avión a modo de bautismo. Es tiempo de desabrochar los cinturones y poner a andar la felicidad de tener dentro de poquito un encuentro con las Cataratas del Iguazú, Maravilla Natural del Mundo.